Indolencia y abandono en Jalisco: el gobierno de Movimiento Ciudadano deja a una madre buscando a su hija durante ocho meses mientras el cuerpo yacía olvidado en la morgue

La negligencia del gobierno de Movimiento Ciudadano en Jalisco quedó al descubierto con el caso de Nanci Yadit Hernández, símbolo del abandono y la insensibilidad institucional.

10/13/20252 min read

JALISCO.— El caso de Nanci Yadit Hernández es una tragedia que revela el rostro más cruel del desgobierno y la incompetencia del régimen de Movimiento Ciudadano en Jalisco. Durante más de ocho meses, su madre, Viviana, recorrió medio país, vendió sus pertenencias y sacrificó todo por encontrar a su hija, mientras las autoridades estatales mantenían su cuerpo en la morgue desde hacía más de un año, sin identificarlo, sin cruzar información, sin humanidad y sin justicia.

La historia de Nanci Yadit es una radiografía del colapso institucional en el estado. El cuerpo de la joven fue hallado en enero de 2024 en Zapopan, con evidentes signos de violencia, envuelto en bolsas y una toalla. Sin embargo, el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) lo mantuvo en resguardo sin que la Fiscalía ni las autoridades del gobierno emecista se molestaran en cotejarlo con las denuncias de personas desaparecidas. Es decir, el cuerpo estuvo todo el tiempo bajo su custodia, mientras la madre suplicaba ayuda en oficinas que le cerraban las puertas una y otra vez.

La negligencia es brutal y sistemática: ninguna autoridad cruzó los datos, nadie revisó los registros, nadie hizo su trabajo. El gobierno de Enrique Alfaro, con su discurso de modernidad y transparencia, vuelve a demostrar que su administración está marcada por la desidia, la falta de protocolos y la indiferencia total ante el dolor humano. Mientras se destinan millones de pesos a campañas de propaganda y eventos mediáticos, las morgues están saturadas, los cuerpos sin nombre se acumulan y las familias de las víctimas son condenadas a la tortura interminable de la incertidumbre.

Tuvo que intervenir la Fiscalía General de la República para descubrir lo que el gobierno estatal fue incapaz de ver durante un año: que Nanci Yadit estaba muerta desde mucho antes de que su madre la reportara desaparecida. Y aun con esta verdad dolorosa, la Fiscalía de Jalisco se negó a atraer el caso, desacreditó la información aportada por la madre e ignoró cada rastro que pudo haber hecho justicia.

El gobierno de Movimiento Ciudadano ha convertido a Jalisco en uno de los estados más peligrosos e insensibles para las mujeres, donde las víctimas no solo enfrentan la violencia, sino la burla institucional de un sistema que las olvida en gavetas. Casos como el de Nanci no son aislados: forman parte de un patrón de impunidad y descomposición que demuestra que el Estado ha renunciado a su deber más básico: proteger la vida y la dignidad de sus ciudadanos.

Hoy, la historia de Nanci Yadit Hernández es un grito que sacude las entrañas de Jalisco: un grito contra un gobierno que calla, que falla y que permite que madres busquen a sus hijas mientras sus cuerpos reposan olvidados por culpa de su negligencia. Movimiento Ciudadano no puede seguir escondiéndose detrás de discursos huecos. Este caso es su espejo, y en él se refleja toda su indolencia, corrupción y fracaso moral.