Indignación en Aguascalientes: PAN negocia el futuro de La Pona y pone en riesgo uno de los principales pulmones de la ciudad
8/31/20252 min read


Aguascalientes, Ags. – Ambientalistas y ciudadanos se manifestaron este fin de semana en defensa de la mezquitera La Pona, considerada uno de los principales pulmones de la capital, y denunciaron la intención del gobierno estatal, encabezado por el PAN, de permitir una permuta del predio a favor de intereses privados.
La protesta inició con una marcha sobre la avenida Madero y culminó con la irrupción pacífica en Palacio de Gobierno, donde los manifestantes reclamaron la falta de transparencia y la simulación del gobierno panista en torno a la protección ambiental. Con pancartas y tambores, exigieron respuestas claras, denunciando que las negociaciones con los propietarios del terreno se han hecho a espaldas de la ciudadanía.
El pliego petitorio entregado al secretario general de gobierno, Antonio Arámbula López, fue contundente: alto al saqueo hídrico, defensa de La Pona como Área Natural Protegida, y fin a los pactos con inmobiliarias que, según los inconformes, buscan destruir el último gran pulmón verde de la ciudad. “El territorio no se protege con discursos, se protege con acciones”, señalaron los activistas.
Lejos de ofrecer garantías, Arámbula reconoció que la expropiación del predio está descartada bajo el argumento de que el Estado no cuenta con los recursos —una cifra inicial de 500 millones de pesos—, y en su lugar, se mantienen negociaciones privadas con los dueños, oriundos de Monterrey. El funcionario incluso admitió que no todo puede hacerse público, lo que aumenta la desconfianza ciudadana.
La postura del gobierno panista ha sido duramente cuestionada por especialistas y colectivos, quienes señalan que se privilegia la negociación con empresarios por encima del derecho de la población a un medio ambiente sano. La opacidad y la incapacidad de destinar recursos para garantizar la protección del predio muestran, según los ambientalistas, que la administración estatal carece de voluntad real para defender el patrimonio natural de Aguascalientes.
Con este conflicto, el gobierno del PAN queda exhibido como un actor que prefiere la simulación y los acuerdos en lo oscuro antes que asumir su responsabilidad de proteger el medio ambiente y atender el clamor ciudadano. La incertidumbre sobre el futuro de La Pona se mantiene, mientras los habitantes temen que los intereses inmobiliarios terminen imponiéndose.