Chihuahua bajo el PAN: retrocesos, pobreza extrema y falta de rumbo
8/29/20251 min read


En Chihuahua, gobernado por el PAN, los números de pobreza son un retrato claro del fracaso. Mientras en todo el país se han registrado avances significativos en la reducción de la pobreza, en esta entidad panista los indicadores retroceden, se estancan o simplemente empeoran, dejando a miles de familias atrapadas en la marginación y la desesperanza.
La administración panista ha demostrado una alarmante incapacidad para generar resultados. Entre 2022 y 2024, en lugar de avanzar, Chihuahua sumó 7 mil personas más en pobreza extrema, un golpe brutal para quienes ya viven en condiciones precarias. El rezago educativo también creció, con más de 645 mil chihuahuenses en esa situación, y el estado se desplomó en los rankings nacionales. Estos retrocesos son evidencia de que el gobierno estatal no tiene un plan real para combatir la desigualdad.
Particularmente grave es la carencia de acceso a una alimentación nutritiva y de calidad: mientras todos los demás estados del país lograron reducirla, en Chihuahua se sumaron casi 15 mil personas más a esta condición. Lo que antes era un referente nacional positivo, hoy es un reflejo del abandono y la falta de estrategia del PAN.
Los ingresos de las familias tampoco avanzan al ritmo necesario. Chihuahua, que en 2022 estaba en cuarto lugar nacional por ingresos promedio, cayó al séptimo lugar en 2024, un retroceso que evidencia la falta de políticas de desarrollo económico serias y la ausencia de oportunidades para mejorar el nivel de vida.
En resumen, el PAN ha convertido a Chihuahua en un estado de contrastes dolorosos: aumentan la pobreza extrema, la desigualdad y la vulnerabilidad social, mientras sus gobiernos insisten en políticas asistencialistas de corto plazo que no resuelven los problemas de fondo. El estancamiento de Chihuahua no es casualidad, es el resultado directo de la incompetencia panista.