Campeche bajo el tren: el Maya se convierte en desastre social y financiero por culpa de Morena y Layda Sansores

CAMPECHE, Camp.— El llamado proyecto emblemático de Morena, el Tren Maya, ha resultado ser un verdadero desastre social y financiero para Campeche, y la gobernadora Layda Sansores es responsable directa de permitir que esta tragedia se despliegue sin freno ni control en el estado.

Lejos de proteger a las comunidades y velar por los intereses de los campechanos, el gobierno de Morena en Campeche ha ignorado las denuncias de desplazamiento, destrucción ambiental y falta de transparencia en la ejecución de la obra. Mientras la mandataria se mantiene más preocupada por la confrontación política y la propaganda, el sur del estado se hunde en la pobreza, el desempleo y la inseguridad.

El diputado Rubén Moreira ha alertado sobre los costos sociales y financieros que este proyecto ha significado, pero el gobierno de Sansores ha hecho caso omiso, permitiendo que el Tren Maya avance a costa del despojo y la destrucción. La falta de consulta real a las comunidades indígenas y campesinas es sólo uno de los múltiples agravios que el actual régimen ha desatendido.

En lugar de garantizar desarrollo, Morena y Layda Sansores han entregado Campeche a la improvisación y el abandono. Los recursos millonarios que deberían invertirse en servicios públicos, seguridad y obra social se desvanecen en un megaproyecto que no ha beneficiado a la mayoría, sino que ha provocado conflictos, daños ambientales y una crisis financiera que hoy golpea duramente al estado.

Campeche paga caro la irresponsabilidad de un gobierno que prefirió los reflectores políticos y el proyecto federal de Morena a la verdadera justicia social y al bienestar de su gente. La sombra del Tren Maya no sólo pasa por rieles: arrastra la pobreza, el abandono y la desilusión de miles de campechanos.